Los dos discípulos de Emaús

Los dos discípulos de Emaús

Los dos discípulos de Emaús

El Salvador dice: «Donde dos o tres están unidos en Mi Nombre, Estoy Yo».

El Espíritu de Luz invita a todos los Espíritus, de la Infinita Creación, a buscar la Verdad en la escucha, en el silencio, en el diálogo, en la confrontación y en el respeto mutuo.

Cuando dos seres caminan juntos, meditando y hablando de Jesús, en la Unidad del Espíritu, la Verdad de Jesús se presenta y se hace sentir con el Fuego del Amor en el corazón. Es en caminar que crecemos, es en buscar que encontramos, es en conocer que amamos en Libertad.

Gracias Espíritu de Luz y Amor, hoy los dos discípulos de Emaús han regresado al comienzo del Tercer Milenio y están caminando y dialogando con Jesús, en Su Segunda Venida, en Espíritu y Verdad.

Los dos discípulos de Emaús que caminan juntos por el camino hacia Emaús hablan del Salvador Jesús quien, en Jerusalén, fue traicionado, apresado, azotado, condenado a muerte y crucificado por los príncipes de sacerdotes y magistrados.

Éstos cuentan cómo algunas mujeres que habían ido al sepulcro, no encontraron el Cuerpo de Jesús y fueron testigos de una visión de Ángeles, anunciando que Jesús ha resucitado de entre los muertos. Mientras hablan de estos eventos, Jesús mismo se acerca y comienza a caminar con ellos, pero los dos discípulos no lo reconocen. Jesús les dice: «¡O insensatos y tardos de corazón para creer todas las cosas que los profetas han dicho! ¿No tenía quizás que sufrir Cristo tales cosas y así entrar en Su Gloria?»

Cuando llegan a Emaús, los dos discípulos le dicen a Jesús: «Quédate con nosotros ya que oscurece y el día ya cae». Jesús se detiene con ellos y, cuando están a la mesa, el Salvador toma el pan, lo bendice, lo parte y se lo ofrece a los dos discípulos.

En ese instante, los ojos de los dos discípulos se abren y reconocen que su Invitado es Jesús, Quien desaparece ante sus miradas. Luego se preguntan: «¿No ardían nuestros corazones mientras por el camino nos hablaba y nos explicaba las Escrituras?». Inmediatamente los discípulos se levantaron y regresaron a Jerusalén, donde se encontraban reunidos los Once y los demás que estaban junto a ellos y les anuncian que Jesús realmente ha resucitado de entre los muertos y cómo lo reconocieron en el «partir el pan».

El corazón pregunta: «¿Quienes representan los dos de Emaús y qué representa el pueblo de Emaús?»